OPINIÓN: CV, DEL GUETO AL FOSO

Primero le quitaron el Tour. Ahora, la Vuelta. Y a partir del 31 de diciembre, el patrocinio. Todo gracias a la Operación Puerto y Eufemiano Fuentes.
Un regusto especialmente amargo para terminar con la historia de un equipo que lleva desde 1981 al pie del cañón, anteriormente con el nombre de Kelme. Todo para terminar con uno de los equipos más prestigiosos del mundillo ciclista, acuciado en sus últimos tiempos por el dopaje, perseguidos y marginados de una manera detestable por la UCI, ASO y, finalmente, Unipublic. Los señores nazis de la UCI, que no se bastan de códigos, vigilancias constantes y tasas que casi parecen multas por correr, tras arrinconar de la sociedad ciclista a Comunidad Valenciana, por fin lo ha enterrado y mandado a la fosa común. Bravo.
Lo sucedido hoy lo conocemos casi todos: la Vuelta a España, mejor dicho Unipublic, ha decidido dejar fuera de carrera a Comunidad Valenciana por su presunta implicación con la Operación Puerto, con CV, en este caso, poniendo amargamente la otra mejilla con estas declaraciones de Vicente Belda: "Ahora mismo es muy difícil hacer una valoración porque estoy demasiado perplejo. Sinceramente, no sé ni qué debo decir porque esto es un desastre grandísimo. Mi primera reflexión es muy clara: Unipublic ha jugado con 32 puestos de trabajo y con el pan de esas 32 familias. Y lo cierto es que han rematado el trabajo que empezaron en Francia. El viernes me llega un certificado de los juzgados diciendo que ninguno de nuestros corredores está siendo investigado ni imputado en el juicio por la Operación Puerto. Y pediremos otro certificado a la Federación Española para que diga si en estos momentos existen abiertos expedientes por dopaje contra cualquiera de nuestros corredores"
Debido a ésta ¿injusta? (injusta quizá no; prematura, sí) decisión de Unipublic, la Generalitat Valenciana, cobardemente dirigida, en este caso, por el PP, ha decidido dejar a un lado las posibles detracciones y una probable mala imagen que le hiciese salir del Gobierno al cual tan fuertemente se agarran, ha decidido tirar por la borda el patrocinio al equipo, dejarlo estar y cortar el grifo el 31 de Diciembre para arrancar de raíz la ilusión de todo un grupo deportivo. Y es que desde los más famosos, como Rubén Plaza o Pecharromán, hasta los más novatos, como Claudio Casas y Vicente Peiró, pueden haber sufrido un golpe casi mortal para su carrera deportiva. O, al menos, mancharla ante los ojos de la hipocresía ciclista